La energía es la principal causante de la emergencia climática y por eso es urgente cambiar hacia un modelo de consumo más limpio, sostenible y respetuoso con las personas y el planeta.
La generación de energía distribuida mediante autoconsumo reúne estas condiciones y permite asegurar que el origen es renovable y evitar pérdidas por el transporte.
Entre los beneficios de instalar energía solar están el ahorro en la factura de la luz, la disminución del impacto medioambiental o la autonomía respecto a las compañías eléctricas. En instalaciones y edificios con un alto consumo energético como las residencias de personas mayores esas ventajas crecen de forma exponencial.